Poema: A un pesimista

Hola lectores!

El poema del cual nos toca hablar hoy es ''A un pesimista'', y pertenece al colombiano José Asunción Silva, considerado como uno de los más importantes precursores del modernismo literario.

A un pesimista 
Hay demasiada sombra en tus visiones, 
algo tiene de plácido la vida, 
no todo en la existencia es una herida 
donde brote la sangre a borbotones. 
La lucha tiene sombra, y las pasiones 
agonizantes, la ternura huída, 
todo lo amado que al pasar se olvida 
es fuente de angustiosas decepciones. 
Pero, ¿por qué dudar, si aún ofrecen 
en el remoto porvenir oscuro 
calmas hondas y vívidos cariños 
la ternura profunda, el beso puro 
y manos de mujer, que amantes mecen 
las cunas sonrosadas de los niños?

Para mí este poema es hermoso, te hace ver el lado bueno de la vida, pues evidentemente va dedicado a alguien que anda por el mundo viéndolo todo gris.

Asunción Silva afirma que aquel pesimista no lo ve todo claro, que algo le impide ver lo que en realidad es, pues la vida está llena de cosas buenas.

Imagino que se lo dedica a alguien que se ha quedado anclado en el pasado y no puede superar alguna aflicción, pues en el tercer verso establece que ''no todo en la existencia es una herida'', me parece a mí, diciéndole que supere su conflicto, pues el resto ya lo ha dejado atrás.

El autor no niega que también hay tristeza en el mundo, afirmando que ''la lucha tiene sombra (...)'', y luego da otro indicio de que el pesimista a quien le habla fue herido, al continuar diciendo que ''todo lo amado que al pasar se olvida es fuente de angustiosas decepciones''.

Silva una vez más le da esperanza cuando declara que el porvenir ofrece ''calmas hondas y vívidos cariños'', y finalmente desvela que aquella futura felicidad vendría en forma de una familia, estableciendo que puede estar seguro de que ''(...) manos de mujer, que amantes mecen las cunas sonrosadas de los niños'' es todo lo que el futuro podría ofrecerle si mirara la vida desde otro lente, uno más positivo.